Un espacio para vivir.
Interiorismo creado únicamente para esta residencia debido a las exigencias de alto-standing que se predispusieron en su creación. Cuenta con tres plantas repartida en un área de 600 m2.
En la planta baja, las zonas comunes convives en un mismo espacio, salón, comedor. Los accesorios son el punto fuerte de la decoración, así como la tranquilidad que transmiten los muebles. La cocina, con una gran isla, posee electrodomésticos europeos y americanos de última generación. La terraza de la cocina ofrece un magnifico rincón donde relajarse y contemplar el paisaje.
En la planta del secundo nivel, todas las estancias dan al exterior, lo que hace que su interior brille y más aún cuando su diseño es tan limpio y espacioso. La gama de grises y blancos inundan las habitaciones.
La ultima planta es una zona recreativa dotado de un solárium en terraza , de una sala audio visual y un amplio salón para relajarse. El cristal es el material que más se ha utilizado para los cerramientos de la fachada